Estás perdida en la ruta no sabes pero pronto lo sabrás,
podrías sin embargo imaginar que estamos por una vez bebiendo una copa, en la cama del hotel a media noche y las estrellas tiritando vibran nuestro amor,
sabes que en cada sueño me ves pasar y te miro de reojo.
En las copas vacías de media noche me buscas y me ves,
en las noches de insomnio me piensas, te busco,
en la noche de sueños rotos pasamos de la mano con una copa en muestro corazón,
me escapé a tu beso a tu amor a tu ciudad a tú obsesión.
a ese perro que no tiene hueso que morder,
ésa venganza del destino y desquite consentido,
estas manos esperan a tus caderas,
soy ese huracán de lunes a viernes y sábado y domingo.
ven que te daré más de lo que tengo y más de lo que puedo ser,
me darás incluso lo que no tienes y más de lo que eres,
no se a donde voy pero juntos vamos a dónde no sé,
sólo se que vamos en las copas riendo más de lo que somos.
Aquí la vida entra en nuestra muerte despertándose del sueño eterno,
el hechizo del cual estamos presos nos tiene un carcelero que es el mismo Dios,
seremos los presos eternos en esta jaula llamada corazón,
mí chica de piel de miel me quedo en éste delito de amor.
ven aquí pequeña y pon tus labios en los míos,
dame esa lágrima y tus fotos en la luna de rayos rotos,
aquí las penas no son impedimentos las penas saben reír,
te espero esta noche de julio entre agosto y septiembre incluso llegando diciembre para regresar en enero.
Una noche más otra menos días más días menos,
soy tu precipicio y tu vendedor de pasión,
no niegues nada,
te tengo al mismo Van Gogh pintando cada estrella,
ven escribamos una carta y en ella los deseos, la guardaremos en el corazón, bajo la noche estrellada del mismo Van Gogh.
Mí chica del traje azul mi chica de estrellas y el walkman en la cartera,
te guardé un poema para tu llegada,
siento tus tacones negros avanzando por el pavimento,
aquí te espero con la cama que es la estufa, una copa y medias lunas.
no habrá teléfonos ni mañanas en relojes de arena,
eres mi inspiración eres la noche de Vicent,
estás en la cama de mi mente estás desnuda entre las estrellas y los rayos de luna,
te tengo entre mis manos y este mano a mano me da tus caderas.
Te tengo ésta muerte que no mata, estos besos que te atrapan,
dos versos de Borges y un poema de Cortázar,
podré estar entre arrugas y juventud entre lunas y multitudes,
aquí en la cama de mi mente te espero y te desnudas sin motivos.
Cómo no pensarte ojos de estrellas boca de miel,
en mis sábanas te deslizas: entre mis dedos; boca de miel, ojos de estrellas,
es el pincel de Vicent quien pinta tu silueta,
te poseo entre mis brazos y las estrellas,
la noche crea el mismo fondo.
Desnuda entre mis brazos te deslizas princesa,
ojos de estrella labios de miel,
sabes que ya no muero por otra,
tampoco lágrimas para presumir.
Eres una entre todas pero la más luminosa entre las luminosa,
éste poema y lo anterior desde el calvario hasta La Paz de tus ojos,
éste loco sin nada que lo guie te besara cómo un salvaje,
me darás de esa miel hasta olvidar las despedidas.
Autor: Francisco Muñoz Vega - Francesco Muga.
podrías sin embargo imaginar que estamos por una vez bebiendo una copa, en la cama del hotel a media noche y las estrellas tiritando vibran nuestro amor,
sabes que en cada sueño me ves pasar y te miro de reojo.
En las copas vacías de media noche me buscas y me ves,
en las noches de insomnio me piensas, te busco,
en la noche de sueños rotos pasamos de la mano con una copa en muestro corazón,
me escapé a tu beso a tu amor a tu ciudad a tú obsesión.
a ese perro que no tiene hueso que morder,
ésa venganza del destino y desquite consentido,
estas manos esperan a tus caderas,
soy ese huracán de lunes a viernes y sábado y domingo.
ven que te daré más de lo que tengo y más de lo que puedo ser,
me darás incluso lo que no tienes y más de lo que eres,
no se a donde voy pero juntos vamos a dónde no sé,
sólo se que vamos en las copas riendo más de lo que somos.
Aquí la vida entra en nuestra muerte despertándose del sueño eterno,
el hechizo del cual estamos presos nos tiene un carcelero que es el mismo Dios,
seremos los presos eternos en esta jaula llamada corazón,
mí chica de piel de miel me quedo en éste delito de amor.
ven aquí pequeña y pon tus labios en los míos,
dame esa lágrima y tus fotos en la luna de rayos rotos,
aquí las penas no son impedimentos las penas saben reír,
te espero esta noche de julio entre agosto y septiembre incluso llegando diciembre para regresar en enero.
Una noche más otra menos días más días menos,
soy tu precipicio y tu vendedor de pasión,
no niegues nada,
te tengo al mismo Van Gogh pintando cada estrella,
ven escribamos una carta y en ella los deseos, la guardaremos en el corazón, bajo la noche estrellada del mismo Van Gogh.
Mí chica del traje azul mi chica de estrellas y el walkman en la cartera,
te guardé un poema para tu llegada,
siento tus tacones negros avanzando por el pavimento,
aquí te espero con la cama que es la estufa, una copa y medias lunas.
no habrá teléfonos ni mañanas en relojes de arena,
eres mi inspiración eres la noche de Vicent,
estás en la cama de mi mente estás desnuda entre las estrellas y los rayos de luna,
te tengo entre mis manos y este mano a mano me da tus caderas.
Te tengo ésta muerte que no mata, estos besos que te atrapan,
dos versos de Borges y un poema de Cortázar,
podré estar entre arrugas y juventud entre lunas y multitudes,
aquí en la cama de mi mente te espero y te desnudas sin motivos.
Cómo no pensarte ojos de estrellas boca de miel,
en mis sábanas te deslizas: entre mis dedos; boca de miel, ojos de estrellas,
es el pincel de Vicent quien pinta tu silueta,
te poseo entre mis brazos y las estrellas,
la noche crea el mismo fondo.
Desnuda entre mis brazos te deslizas princesa,
ojos de estrella labios de miel,
sabes que ya no muero por otra,
tampoco lágrimas para presumir.
Eres una entre todas pero la más luminosa entre las luminosa,
éste poema y lo anterior desde el calvario hasta La Paz de tus ojos,
éste loco sin nada que lo guie te besara cómo un salvaje,
me darás de esa miel hasta olvidar las despedidas.
Autor: Francisco Muñoz Vega - Francesco Muga.