Mis penas no son tan tristes,
lo triste es tener penas por cosas realmente tristes,
cuando las cosas se van de mis manos vuelvo a la sonrisa forzada,
cuando cierran las cantinas y no hay besos,
pongo una canción que le guste mofarse de mí.
Nada es amargo nada es entero o eterno,
al final de las noches no hay sueños rotos,
siempre despiertas a cantar otra vida,
vaya, mil corazones que desean reír junto a mí.
No tengo religión me sobra la pasión,
me largo y regreso a mí voluntad y no confisco ninguna conciencia,
muchas faldas pensaron en dañar a éstos huesos sin alma,
soy el camino pero no para tú verdad.
No hay besos ni manos devueltas,
es
soy
seras
interrogación.
Ahora me voy en el ultimo tren con libros bajo el brazo,
me voy a otra ilusión,
no me queda más corazón para éste amor,
me iré con otra 15 años menor.
tengo más que la misma vida, tengo la muerte entre mis páginas,
aunque todo lo que no tiene sentido gobierne lo que llamas verdad,
ganaré mil besos en mil camas,
por alguna razón el diablo me dio lo que Dios me quitó.
Ahora en el después,
arriba de éste tren me di cuenta que sólo fuiste una estación más,
lo bueno de este viaje es que no hay puertos ni finales tan finales,
éste tango de espíritu que me gobierna canta con crueldad.
Qué soledad
que amor,
que instructivo,
que vejez,
que versos,
que días,
que mañanas,
que fracasos.
No me maneja la cirrosis,
no me gobierna tu dios menos tus demonios,
ya no existen miedos,
ya es tarde me llevo mis libros y cuentos viejos.
No me pasaré la puta vida pidiendo mandas,
no me rendire a demonios ajenos,
voy en el tren con otra 15 años menor,
esta ropa nueva vestida de vida se sacude las viejas polillas del encierro.
lo triste es tener penas por cosas realmente tristes,
cuando las cosas se van de mis manos vuelvo a la sonrisa forzada,
cuando cierran las cantinas y no hay besos,
pongo una canción que le guste mofarse de mí.
Nada es amargo nada es entero o eterno,
al final de las noches no hay sueños rotos,
siempre despiertas a cantar otra vida,
vaya, mil corazones que desean reír junto a mí.
No tengo religión me sobra la pasión,
me largo y regreso a mí voluntad y no confisco ninguna conciencia,
muchas faldas pensaron en dañar a éstos huesos sin alma,
soy el camino pero no para tú verdad.
No hay besos ni manos devueltas,
es
soy
seras
interrogación.
Ahora me voy en el ultimo tren con libros bajo el brazo,
me voy a otra ilusión,
no me queda más corazón para éste amor,
me iré con otra 15 años menor.
tengo más que la misma vida, tengo la muerte entre mis páginas,
aunque todo lo que no tiene sentido gobierne lo que llamas verdad,
ganaré mil besos en mil camas,
por alguna razón el diablo me dio lo que Dios me quitó.
Ahora en el después,
arriba de éste tren me di cuenta que sólo fuiste una estación más,
lo bueno de este viaje es que no hay puertos ni finales tan finales,
éste tango de espíritu que me gobierna canta con crueldad.
Qué soledad
que amor,
que instructivo,
que vejez,
que versos,
que días,
que mañanas,
que fracasos.
No me maneja la cirrosis,
no me gobierna tu dios menos tus demonios,
ya no existen miedos,
ya es tarde me llevo mis libros y cuentos viejos.
No me pasaré la puta vida pidiendo mandas,
no me rendire a demonios ajenos,
voy en el tren con otra 15 años menor,
esta ropa nueva vestida de vida se sacude las viejas polillas del encierro.